El anillo de diamantes del juez

En los pasillos de los tribunales no se habla de otra cosa que del anillo de diamantes del juez Néstor Oyarbide, una joya carísima, comparable con las que Richard Burton le regalaba a Liz Taylor en el apogeo de su romance. Famoso por haber procesado a celebridades como por su excentricismo, no se priva de enseñarlo a guardias o a los jóvenes pasantes que se cruzan en su camino.
Un medio de prensa señaló que el diamante que el personaje lleva en el dedo del corazón vale 250.000 dólares. Oyarbide confirmó que para adquirirlo tuvo que empeñar todos los regalos que ha recibido en los últimos cinco años. El dueño de una de las joyerías más reconocidas de Buenos Aires comentó a la prensa que un anillo de ese valor “no es para lucirlo en público sino para guardarlo en el fondo de una caja de seguridad”.
Al juez Eugenio Zaffaroni no le causa gracia que un correligionario se pasee por Buenos Aires enjoyado como un maharajá. “Da la impresión de todo se reduce a que (Oyarbide) se compró un anillo. Eso es transformar la noticia en un asunto de la farándula”, sentenció el juez de la Corte.
Oyarbide tardó menos de un mes en sobreseer a Néstor y a Cristina Kirchner de los cargos de enriquecimiento ilícito que presentó un diputado, en el 2010. Ese mismo año, el dandy de la Justicia argentina procesó a Mauricio Macri, por presunto espionaje político. Actualmente instruye la causa de Sergio Schoklender, el ex administrador de las Madres de Plaza de Mayo, acusado de lavado de dinero y desvío de fondos públicos. En los últimos días Oyarbide ha vuelto a capturar la atención del público por su amistad con Raúl Martins.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Quejas por organización que vende cursos "on line"

Denuncian a médico de Tribunales II por maltrato laboral

Día del Abogado: La nueva generación de oro