Los hermanitos escándalo

La familia Espina está integrada por 11 hermanos, entre los que se cuentan dos sacerdotes, una monja y dos abogados.

La familia Espina está integrada por 11 hermanos, entre los que se cuentan dos sacerdotes, una monja y dos abogados. El más conocido sigue siendo Julián, el sacerdote de dos metros de altura nacido en Gijón, España, que ha demostrado no tener miedo de defender sus creencias religiosas poniendo en juego su físico.
“Si tengo que defender a mi madre de los cielos a las trompadas, lo voy a hacer”, declaró en una oportunidad. Todos lo creyeron capaz.
Las intervenciones públicas de los católicos sedevacantistas dirigidos por los hermanos Espina siempre alcanzaron repercusión nacional.
La primera ocurrió en 1996, cuando decidieron oponerse al estreno de la película La última tentación de Cristo , del consagrado director estadounidense Martin Scorsese. Sus oposiciones tuvieron éxito, ya que la película no se estrenó y pasaron años hasta que los cordobeses pudieron verla en el cine.
La segunda intervención fue en 2004, durante la intendencia de Luis Juez. La Secretaría de Cultura municipal había organizado una muestra artística navideña en el Cabildo y convocó a varios de los mejores artistas locales para que realizaran obras alusivas, con total libertad. Entre ellos, estaba Roque Fraticelli, quien realizó una instalación con una ilustración de la Virgen teniendo relaciones con otro personaje de la iconografía católica.
Los hermanos Espina llegaron y consiguieron que la muestra fuera clausurada.
Tres años después se produjo el episodio en el Centro España Córdoba, cuando los Espina y otro grupo numeroso de personas irrumpieron en la muestra de dibujos de Alfonso Barbieri y en las paredes del centro dejaron marcas de sangre luego de enfrentarse a trompadas con los policías.
El dibujo que más molestó mostraba, a modo casi infantil, angelitos orinando en un dibujo en el que aparecía la Virgen María.
A fines de 2007, volvieron a generar un escándalo en la Ciudad Universitaria, cuando evitaron que se exhibieran obras artísticas que habían sufrido censura, entre ellas las obras que ellos pidieron que fueran destruidas. Debió intervenir un fiscal federal.
En Punilla, los hermanos Espina también participaron, el año pasado, en manifestaciones que interrumpieron la ruta 38 para oponerse a un programa de tratamiento de residuos sólidos que intentaba enterrar restos en la zona de Pampa de Oláen.

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